Tu cesta esta vacío
¿Tienes una cuenta? Iniciar sesión para finalizar tus compras con mayor rapidez.
¿Tienes una cuenta? Iniciar sesión para finalizar tus compras con mayor rapidez.
Olvidas los electrolitos.
Cuando cambias a una dieta cetogénica, los niveles de electrolitos de tu cuerpo (sodio, potasio y magnesio) disminuyen, lo que lleva a una probable descompensación.
Habla con tu médico y nutriólogo acerca de tomar suplementos de electrolitos o comer alimentos ricos en potasio y magnesio.
Lo haces solo.
El apoyo social hace una gran diferencia. Puede ser una transición difícil, pero tener a alguien que te acompañe a menudo genera mayores beneficios.
Tu “keto amigo” no tiene que ser alguien que veas. Los amigos en línea también funcionan, así que considera unirte a un grupo en alguna red social o app.
Estás descuidando tu intestino.
Un microbioma intestinal diverso, ayuda a la digestión y a la absorción de nutrientes y es clave para mantener un metabolismo sano.
Dado que la dieta keto tradicional limita algunos alimentos saludables para el intestino, el apoyo con pro y prebióticos es imprescindible. Sin éstos, se afectará la velocidad a la que pierdas peso.
Tomaste un día “libre” (o algunos).
Ese croissant puede parecer sabroso, pero si “haces trampa” tu cuerpo volverá a su combustible preferido (glucosa) y regresarás al punto de partida, esperando días y días para alcanzar la cetosis nuevamente.
Todo lo que necesitas para construir una vida saludable
Mi compromiso es guiarte y apoyarte a lograr los objetivos que te propongas, de una manera real y sostenible
Estilos de alimentación que te ayudarán a lograr y mantener tu peso ideal